Si hay algo que me fastidia es cuando compro o me regalan un montón de tomates es que al final se me acaban estropeando otro montón de ellos por no tener tiempo a usarlos. Pues bien un día probé varias formas de conservarlos y una de las que más me gusto es esta de secarlos y preparar tomate en polvo, vamos a conseguir un ingrediente repleto de sabor, que es un complemento absolutamente delicioso en algunos platos y con mucha versatilidad para usar en muchas recetas.
Es fácil de hacer y una buena opción para conservar los tomates ahorrando espacio y evitando que se nos estropeen. Así que vamos a ver como seco los tomates para conservarlos y cómo hacer tomate en polvo y para usar algunas recetas.
Sobre todo es fácil usando algún deshidratador para ello, como estos que te pongo debajo pero como yo no lo tengo aún, uso otros métodos que también te explico a lo largo del artículo.
Indice
Tomates secos en polvo
Lo primero para preparar tomate en polvo es secar los tomates y ver que los podemos conservar durante más tiempo, ya luego el paso de «hacerlos» polvo, es opcional según tu decidas. Una vez el tomate esta seco es mi forma favorita para poder usarlo en diferentes recetas, más abajo te daré ideas, además de que no hay ni que congelarlo ni nada, el tomate seco ocupa mucho menos espacio que en fresco.
Para hacer los tomates secos tan solo vamos a necesitar un ingrediente, evidentemente los tomates, en cualquier variedad que queramos, únicamente luego tendremos que tener en cuenta el contenido en agua de los mismos a la hora de secarlos. Como ingredientes opcionales estarían si quieres sazonarlos antes del secado, más abajo te cuento.
Por regla general, algunas variedades de tomate contienen más agua que otras, por ejemplo los tomates más redondos y achatados tienen más contenido en agua que los tomates tipo ovalados que suelen tener más contenido en carne, así que estos últimos tardaran menos tiempo en secarse, dependiendo de su variedad y tamaño solo tienes que ajustar los tiempos, los métodos son los mismos.
Procedimiento para secar tomates
Como cada vez que usamos cualquier ingrediente para la cocina, venga de donde venga, lo primero vamos a lavarlos bien bajo el grifo de agua y quitarles los tallos si vienen con ellos.
Una vez que ya los tienes limpios y secos, hay que cortarlos en rodajas lo más finas posibles y los más iguales que puedas, puedes hacer uso de una mandolina y te quedaran todas perfectas o bien a ojo pero con un cuchillo muy bien afilado. Hay gente que para secarlos al sol, los parte en trozos, pero eso es a tu elección y el tiempo del que dispongas.
Una vez que tienes tus rodajas de tomate preparadas, es hora de ponerlas en las bandejas del deshidratador si lo tienes o en la bandeja del horno sobre una rejilla, eso si, no te recomiendo que las pongas sobre papel de horno, se pegaran (por experiencia), colócalas separadas entre si de forma que no se toquen y mucho menos que estén apiladas unas sobre otras. Para el secado al sol, también te recomiendo usar rejillas.
Llegado este momento, si quieres puedes condimentarlos con sal (yo uso sal gruesa) y alguna especia que te guste, aunque yo lo suelo hacer sin nada y luego cuando lo uso ya sazono la receta a mi gusto según el uso que les dé.
Así que de momento vamos a ver como secar tomates con diferentes métodos y luego tú ya eliges es que prefieras para hacer tus tomates secos caseros, el polvo o no.
Como secar tomates en el horno
Una de las opciones que tenemos para secar nuestros vegetales es hacer tomates deshidratados al horno, los secamos directamente en nuestro horno de casa.
Tendrás que utilizar la temperatura más baja que tenga tu horno y mejor si dispone de la función de ventilador (tardara menos) para ayudar a que se sequen antes.
También he visto cuando buscaba como hacerlo que había gente que dejaba la puerta del horno un poco abierta, en teoría para dejar salir mejor la humedad, pero a mi no me ha sido necesario.
Una vez que tengamos nuestro horno caliente el horno, vamos a introducir la bandeja con los tomates para secar. El tiempo de secado de los tomates va a depender del tipo y tamaño de los tomates que utilicemos, pero para que te hagas una idea, el proceso de secado puede durar entre 4 y 10 horas.
Los tendremos cuando su color se haya oscurecido bastante, notemos la textura dura y dejen de estar como pegajosos. Listos nuestros tomates.
Como secar tomates en una deshidratadora
Esta es quizás la forma más fácil de secar tomates y no solo tomates, si no prácticamente cualquier ingrediente que tengamos fresco, desde carne a hierbas aromáticas.
Generalmente tan solo es seguir las instrucciones que te traen par secar los diferentes tipos de alimentos y en el caso de los tomates a mí me quedan mejor poniéndola a la potencia más baja que tiene.
Eso si, este método también requiere de paciencia y esperar entre 10/12 horas para tener los tomates bien secos.
También te recomiendo para este tipo de electrodomésticos, conseguir unas laminas de silicona que hay en el mercado y que te evitaran que se te peguen los tomates en las rejillas que trae y facilita la limpieza después de usarla.
Secar tomates al sol
Evidentemente esta opción es ideal para usarla en verano cuando las temperaturas son altas y tener éxito para secar los tomates.
Este método es relativamente simple aunque podemos hacerlo de diferentes maneras, pero siempre hay un proceso común:
- Lavado y secado. Elegiremos los tomates más maduros y los lavaremos bien bajo el chorro de agua del grifo, los secaremos con un paño o papel de cocina.
- Cortado de los tomates. En este punto vamos a cortar nuestros tomates en 2 (si son muy grandes puedes hacerlo en 4 partes) y los ponemos en una bandeja sobre una rejilla que nos va a permitir tener ventilación en nuestros tomates por todos los sitios y evitar las manchas que suelen aparecer los primeros días.
- Condimentado. Esto es opcional pero si quieres es el momento de hacerlo, podemos aplicar una fina capa de sal gorda sobre ellos y si quieres darles un toque más personal y te gustan las especias, les vienen bien especias como el Romero, Tomillo, Albahaca o el Orégano.
- Poner al sol. Pondremos nuestras bandejas con el tomate a secar bien expuestas al sol, procurando que les den las máximas horas posibles, este proceso puede durar de 5 días a 2 semanas, dependiendo del clima y del corte. He leído que hay gente que les pone algún tipo de paño que deje pasar el sol y así evitar que vayan los bichos, pero si los has condimentado con sal, lo normal es que no vayan los bichos.
Durante los días que los tengamos secando es recomendable guardar las bandejas con los tomates durante la noche, para evitar que con la humedad de la noche se nos rehidraten y alargue el proceso de secado o incluso que se nos estropeen.
También cada par de días, podemos estirar un poco por la zona de la piel para favorecer que se agriete y permita sacar más humedad.
¿Cuándo están listos?
Estarán listos cuando hayan pasado a un color rojo oscuro, con una textura firme, no flexible y dejen de estar pegajosos. Si se te quedan con algo de humedad, el tomate puede desarrollar moho así que si no estas seguro, puedes ponerlos un poco al horno con el método que te he explicado antes.
Almacenar el tomate seco en rodajas
Esta parte no tiene mucha ciencia, simplemente la mejor opción es guardarlos en un recipiente hermético en el que no quede mucho aire y en un sitio fresco y seco.
Si no te convence la técnica de guardarlos en el tarro al aire, puedes llenar el tarro de aceite de oliva hasta arriba y conseguirás que aguante bastante más tiempo o incluso con la técnica del baño María.
Puedes aumentar el tiempo que te duren si los guardas dentro de la nevera.
También puedes guardarlos en bolsas de plástico, aunque esta no es mi opción favorita, intentando eliminar todo el aire posible de la bolsa antes de sellarla, puede usar una máquina de envasado al vacío con cuidado de no cargarte todas las rodajas.
Eso si, si en algún momento ves que desarrolla moho, tíralos.
Como hacer el polvo de tomate seco
Para conseguir hacer el polvo de tomate seco, las rodajas de tomate tienen que estar completamente secas y poder romperse con facilidad.
Podemos usar un robot de cocina o incluso una batidora de mano para triturar los tomates secos hasta convertirlos en polvo. Si usas una batidora de mano quizás te sea más fácil triturarlos si los rompes antes de añadirlos al vaso.
Si ves que el polvo que has conseguido no es suficientemente fino, puedes usar un molinillo de café para terminar de dejarlo aún más fino.
Una vez pasado por el molinillo, lo puedes pasar por un colador para separar las partes más grandes y volver a triturarlas y así obtener un polvo de tomate más homogéneo.
Guardar el polvo de tomate seco
Simplemente guarda tus tomates secos en recipientes herméticos en un lugar fresco y seco y abre solo el que vayas a usar.
Cuenta la leyenda que si guardas los botes en la nevera durara casi indefinidamente (eso si, si lleva mucho tiempo comprueba que no tenga moho) si has hecho bien el proceso de secado de los tomates
Como usar el polvo de tomate
El tomate en polvo es un ingrediente muy versátil en la cocina, tanto para añadirlo a sopas, guisos o alguna salsa.
Puedes usarlo como cualquier otro condimento en polvo para sazonar carnes o pescados.
Yo he probado a mezclarlo con pequeñas cantidades de agua y conseguimos una salsa de tomate instantánea.
Incluso puedes usarlo para ponerlo sobre una pizza o hacer pasta casera con él.
En fin y como conclusión, con este polvo de gran sabor a tomate, podemos enriquecer todas nuestras recetas de elaboraciones de masas o panes, bizcochos salados, salsas, pestos, patés con queso y todo lo que se te ocurra: hace las veces de gran colorante y saborizante natural que además hemos hecho en casa.
Y por si no te atreves aún a preparar tus tomates secos te dejo por aquí otras opciones «menos caseras» con la idea de si quieres probarlo y luego decidirte a elaborar el tuyo propio.
Como hacer y usar más condimentos