Ahora que nos acercamos al corazón de las fiestas navideñas, las cenas se convierten en más que simples encuentros culinarios; son momentos de conexión, celebración y tradición con familiares y amigos. Las cenas navideñas han evolucionado a lo largo de los siglos, se han ido fusionando los sabores más tradicionales con otro con toques más modernos. Desde platos clásicos hasta creaciones actuales, preparar una cena navideña ya es casi un arte en el que demostrar todo el amor y cuidado. En este artículo, te invito a explorar la historia detrás de algunos de los platos navideños más emblemáticos y te propongo alternativas más modernas como son los menús ya preparados para estas festividades.
Viaje a Través de los Sabores Navideños:
La historia de las cenas navideñas se remonta a tiempos ya muy antiguos, donde en cada región y cada cultura ha contribuido con sus propias tradiciones y como no, deliciosos platos. En la mesa navideña, uno de los reyes indiscutibles es el pavo asado, sobre todo en la tradición de muchas mesas estadounidenses, pero la popularidad de este plato no ha sido siempre. Originario de América del Norte, el pavo se introdujo en Europa gracias a los exploradores durante el siglo XVI y es asi como eventualmente se incorporó a las festividades navideñas.
En Europa, para las cenas navideñas históricamente se presentaban platos como puedan ser con ganso, pato, y carnes de caza, que se adornaban con ricas guarniciones ricas y salsas especiales. En España, quizás el más tradicional y preparado, es el cordero asado, un clásico que ha resistido el paso del tiempo y resistirá aun muchos años. Mientras tanto, en América Latina, los menús de la cena navideña puede incluir tamales, bacalao, y otros platos con sabores tradicionales de las regiones donde se preparan.
Ventajas de Optar por Menús Preparados:
Como todos sabemos, las navidades no solo se resumen en comer y beber buenas viandas y siempre es un periodo del año en el que las compras, las citas con amigos, viajes y demás acaban por generar mucho estrés a la gente que realmente le gusta la navidad, si en medio de este ajetreo navideño, añadimos la preparación de una cena navideña desde cero puede resultar totalmente abrumador. Es aquí donde los menús preparados aparecen como verdaderos salvavidas de cenas y comidas. ¿Por qué considerar que es una buena opción?
Ahorro de Tiempo: La planificación, compra y preparación de una cena navideña completa nos va a llevar bastantes horas de dedicación. Optar por un menú preparado nos va a dar un valiosos tiempo que podemos dedicar a otros menesteres como disfrutar con tus seres queridos o a otros preparativos festivos.
Variedad sin Complicaciones: Estos menús navideños preparados ofrecen una amplia variedad de opciones, desde los platos más tradicionales hasta opciones como puedan ser las vegetarianas o de cocina internacional. Esto nos garantiza que todos los comensales encuentren algún plato que satisfaga sus gustos y preferencias.
Reducción del Estrés: La temporada navideña puede ser estresante sobre todo para algunas personas, y la cocina a menudo es el centro de esa tensión que puede acabar explotando. Al elegir un menú preparado, eliminas la presión de la preparación de las recetas y te va a permitir disfrutar mas relajadamente de la celebración.
Evitar Desperdicios: Habitualmente estos menús preparados, los ingredientes se proporcionan en las cantidades justas necesarias, reduciendo el riesgo de desperdicios alimentarios, las típicas sobras de las cenas navideñas que muchas veces acabamos comiendo al día siguiente, y aun así, no somos capaces de terminar con todas las preparaciones. Así que esto no solo es beneficioso para tu bolsillo, sino ya que vamos a generar menos residuos, también los es para el medio ambiente.
Conclusión:
Las cenas navideñas son más que comer para alimentarnos son en si, una expresión de amor, cariño, tradición y conexión entre personas. Desde los orígenes históricos de los platos más tradicionales hasta las opciones modernas de los menús preparados, cada elección en la mesa cuenta al final es una historia que recordaremos. Como consejo final si consideras la opción de menús preparados, no solo reduces el estrés que provoca todo lo que hay alrededor de las preparaciones de cocina, sino que también ganas un tiempo en el que tu espíritu navideño brille con todo su esplendor. ¡Toca celebrar estas festividades alegría, gratitud y, por supuesto, deliciosa comida!